MI VIDA EN STUTTGART

viernes, 5 de noviembre de 2010

Miércoles 3 de noviembre

Tengo una adicción que debo confesar… no es algo reciente, ya venía manifestándose desde enero más o menos, coincidió con mi cambio de casa al Cajón del Maipo.
Estoy adicta a facebook, a mi email, bueno, en resumidas cuentas soy adicta a internet… ya  lo dije y qué?
Todo empezó cuando me dieron reposo en mis últimas semanas de embarazo, me pasé en la cama del 5 de enero hasta el 24 de febrero que nació mi hija. En esos días, en los que escasamente sentía calor porque allá poco se notaba gracias al viento que corría todo el día, leía mucho, mi mamá y mi suegra me abastecieron de un buen surtido de libros y revistas que devoré. También vi mucha tele, sobre todo series gringas, Criminal minds, Friends, La ley y el orden UVE, Cold case por nombrar algunas. Obvio escuchaba música y dormía… oh! dormía como no he vuelto a dormir!!!
Y entre una cosa y otra, revisaba mi mail y copuchenteaba en facebook todo el día. Sí, porque qué otro nombre se le puede dar a mirar los perfiles de otras personas, sus fotos, videos y demases.
Después que nació la Libe, vino un proceso de ajuste en mi relación con la web, entre pañales, dar pecho, chocherías y siestas desesperadas a penas la guagua se dormía, igual me las arreglaba para entrar al facebook y sociabilizar con mis “amigos”.
Hasta que un día me di cuenta que era adicción porque en cuanto tenía dos minutos libres, prendía el notebook y me conectaba, a veces, entre un cambio de pañales, click, ahí estaba mi medio de conexión con el mundo, claro porque viviendo en el Cajón del Maipo y con una guagua chica, mi vida social pfff! decir que desapareció es poco, yo no podía salir mucho y pocos amigos me iban a ver; entonces la única manera de sentirme más en contacto con la real life era la web.
Ahora acá, demás está decir que internet me hace sentir acompañada… qué aberración no? Algo tan frío e impersonal me da calor humano… por eso paso con el notebook encendido todo el día, por ende, conectada todo el día. Entro y salgo de las páginas y redes sociales a cada rato, voy a buscar algo al dormitorio, vuelvo y abro facebook, se le cae un juguete a la Libe, lo recojo y abro mi mail. A veces me agoto de mi por esto, pero ya lo dije, partí confesando que esto es una adicción, creo que es el primer paso para superarlo dicen los expertos.
Y ahora, a facebook y el mail, se sumó Skype, vivo pendiente de si alguien de mi familia se conecta para llamarlo y conversar. Soy muy patética? No lo sé, tal vez, pero en mis circunstancias dadas ver en qué está mi gente me hace sentir menos sola. Sepan que los espío a todos, sí, a ti y a ti y a ti también, no se mueve una mosca en facebook sin que yo no lo sepa señores!! (uuuyy que susto, no me vaya a penar el caballero por molestarlo, con todo lo que lo maldije en vida)
Lo único que no me ha gustado nunca de facebook es que, las personas que me importan, me saluden por ahí para mi cumpleaños, en vez de llamarme. Al principio me resultaba chocante y pensaba que el mismo tiempo que gastó en escribirme un saludo me podría haber llamado; me empezó a dar rabia que eso pasara, entonces en venganza hice lo mismo cuek! Sí, bien incoherente. Y ahí estoy ahora, saludando por facebook a todo el mundo. Bueno, acá no me quedará otra que saludar así no más, la chauchera sólo se abrirá para llamadas excepcionales. Y obvio que aceptaré feliz que me saluden, prometo no enojarme, pero será única y exclusivamente por mis próximos dos cumpleaños, de ahí, me llaman ya?
Y potenciando mi adicción, más encima se me ocurre crear un blog JA! El pronóstico de mejoría no se ve nada alentador.

No hay comentarios:

Publicar un comentario